Ciclo Rankine
El ciclo Rankine es un ciclo que opera con vapor, y es el que se utiliza en las centrales termoeléctricas. Consiste en calentar agua en una caldera hasta evaporarla y elevar la presión del vapor. Éste será llevado a una turbina donde produce energía cinética a costa de perder presión. Su camino continúa al seguir hacia un condensador donde lo que queda de vapor pasa a estado líquido para poder entrar a una bomba que le subirá la presión para nuevamente poder introducirlo a la caldera.
A la izquierda de la campana tenemos estado líquido, que apenas varia su volumen cuando se calienta o se aumenta su presión. Por eso las líneas isotermas son casi verticales.
A la derecha de la campana tenemos vapor, que se comporta como un gas, por lo que las líneas isotermas son similares a las de los gases ideales.
En el interior de la campana, el líquido se está evaporando, y las líneas de temperatura constante son horizontales. Esto es debido a que dada una presión, el calor que se le aporte al fluido no se emplea en elevar la temperatura, sino en la evaporación.
Este ciclo Rankine es el que también cumplían las antiguas locomotoras y máquinas de vapor. Para realizar el trabajo se utilizaba un cilindro de doble efecto con un sistema provisto de una pieza desplazable llamada corredera cuya misión era enviar el vapor a un lado u otro del pistón.
Bibliografía
Evelyn Carrillo 683005